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Colombia y Argentina frente a la crisis del Corona Virus

Queridos amigos,

Gracias por su apoyo en oración para el trabajo de Langham Predicación a lo largo del mundo. Por favor sigan orando, aún si todos nuestros seminarios se han detenido por la crisis del Covid-19. En las siguientes semanas, planeamos dirigir nuestros motivos de oración a países específicos y recibir mensajes de ánimo de parte de nuestros líderes.



Dionisio Orjuela (Coordinador regional, Centro América) nos pone al día sobre la situación en Colombia:

El alcalde de una de las ciudades más pobladas y pobres en Colombia expresó: “Mi mayor preocupación no es que las personas vayan a morir de Covid-19, sino que mueran de hambre”. El impacto económico de la cuarentena nacional decretada por el gobierno es grande, particularmente para los trabajadores informales que viven del día, de ventas en las calles. El desempleo en Colombia es alto y a pesar que el gobierno nacional y los locales están tomando medidas, estas parecen ser insuficientes.

Esta situación nos tomó a todos de sorpresa. Estamos buscando por respuestas. Únanse a mí en oración para que cada coordinador de Escuelita, cada facilitador, cada pastor y líder relacionado al Movimiento de predicación sea pastoreado por el Señor y su Palabra en este tiempo, y que encuentren las mejores estrategias posibles para pastorear a las personas e iglesias donde sirven como pastores y líderes.

En mi propia búsqueda de respuestas, Dios me llevó a los Salmos. Ayer y hoy estuve meditando en el Salmo 11. Observen a la pregunta y respuesta de David: “¿Cuándo los fundamentos de la ley y del orden se desmoronan, ¿qué pueden hacer los justos?” (v3) Entonces encuentra la respuesta: “En el Señor hallo refugio” (v1). Frente a esta revuelta global, nos preguntamos “¿qué podemos hacer como iglesia” y “qué debemos hacer como predicadores?” Nuestra respuesta debe ser: “¡En el SEÑOR pongo mi confianza!”

Wilfredo Weigandt (Coordinador regional, Cono Sur) nos pone al día sobre la situación en Argentina:

Hay serios temores en torno a las consecuencias sociales para Argentina, un país con un nivel demasiado alto de deuda externa, enfrentando un tiempo indefinido de actividades productivas detenidas.

En el Movimiento de predicación estamos esperando que cada participante en nuestros talleres continúe con su estudio personal y preparación, y que cada grupo se reúna de una forma virtual, usando los chats de Skype, Zoom, o Hangouts. Únanse en oración para que este proceso de formación de predicadores continúe mientras mantienen viva llama de pasión y excelencia por la predicación, durante estos tiempos tan difíciles.

En un tiempo donde la fragilidad de los seres humanos y creación es tan evidente, oremos para que mi nación argentina busque a Dios en humildad, adoración y amor”.

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